Pareja inconveniente

"Sansón descendió a Timnat y vio allí a una joven filistea. Cuando él volvió, les dijo a sus padres: —He visto en Timnat a una joven filistea; pídanla para que sea mi esposa. Pero sus padres le dijeron: —¿Acaso no hay ninguna mujer aceptable entre tus parientes, o en todo nuestro pueblo, que tienes que ir a buscar una esposa entre esos filisteos incircuncisos? Sansón le respondió a su padre: —¡Pídeme a esa, que es la que a mí me gusta!" Jueces 14:1-3

La vida de Sansón comenzó y terminó de la misma manera, su carácter demostraba que era un hombre impulsivo e incapaz de controlar sus pasiones. Una prueba de esta debilidad fue su inclinación hacia las mujeres filisteas. El texto original dice que en Timnat lo primero que vio fue a una joven filistea que lo cautivó, eso no fue “amor a primera vista” ¡Fue "lujuria" a primera vista!

Parece que Sansón se encaprichó. En la sociedad israelita se reconocía al padre como cabeza de familia y, como tal, era el único que elegía esposas para sus hijos. Pero Sansón hizo su propia elección y tomó su propia decisión. ¿No se habría acordado que era nazareo? Sansón fue llamado para vivir una vida consagrada a Dios, pero ya nada le importó porque se encaprichó con esa mujer y traicionó a sus padres, traicionó y desobedeció su compromiso de santidad, fue desleal con Dios. Sansón quería vivir agradando sus sentidos antes que vivir agradando a Dios.

El enamoramiento de Salomón nos deja ver señales que demuestran una relación tóxica.:

1) Sansón vio a la chica filistea y le gustó. realmente no le importaba nada de ella como persona. Simplemente la vio y la deseó. Ella era un objeto para ser usado, poseído. No hubo un periodo de tiempo como para que él la conociera mejor, para identificar sus necesidades, conocer a su familia. El simplemente la vio y la quiso ¡Su pedido era como hacer una compra! Las relaciones que no prosperan son las que están basadas solamente en la atracción y el deseo.

2) Sansón ignoró completamente la Palabra de Dios. Las escrituras del Antiguo Testamento, que Sansón conocía desde pequeño, eran muy claras sobre la prohibición de Dios de los matrimonios mixtos entre los israelitas y las naciones paganas vecinas. Esta prohibición la dio Dios, porque sabía que si se casaban con estos pueblos idólatras, la misma nación de Israel se volvería idólatra. Pero también porque las esposas paganas contaminarían los hogares con sus ídolos. Y Dios sabía que las esposas elegidas de estas naciones también serían miserables. ¡Este mandato fue hecho con amor para que no se hagan daño!

3) Sansón desobedeció a sus padres. Si te enseñan una regla desde pequeño, es imposible olvidarla, pero Sansón decidió desobedecer a sus padres para quedarse con lo que le provocaba placer. Si por capricho decides por una persona que no recibe la bendición de tus padres es una señal clara que esa relación no prosperará.

Todos los padres cristianos anhelamos tener un hogar donde los hijos son creyentes sinceros, temerosos de Dios, obedientes a su Palabra y verdaderos discípulos de Jesucristo. Pero en este caso vemos que un hogar consagrado no es garantía de tener una familia con hijos cristianos, si ellos deciden rechazar la influencia espiritual.

Los padres no tuvieron la culpa; Sansón fue responsable de sus decisiones. El Señor le había dado a Sansón una herencia piadosa, él había sido levantado para honrar al Señor; pero cuando Sansón se enamoró (mejor dicho se encaprichó), no escuchó a sus padres cuando le advirtieron. Fue Sansón quien decidió ir a Timnat, se metió en esta ciudad pagana, se quedó allí hasta recorrer cuatro millas en este territorio enemigo, y allí fue cautivado por una mujer filistea y decidió casarse con ella. Cada hijo que toma decisiones personales son responsables de las consecuencias que vendrán con ellas.

En el simbolismo del Antiguo Testamento, los filisteos representan la carne en nuestra vida, es decir el pecado, la idolatría, las pasiones desordenadas, etc. También “Egipto” simbolizaba el mundo, y ellos dos: “la carne y el mundo” son enemigos de Dios.

La carne es ese principio del mal que entró en el hombre con la caída de Adán y Eva. Es responsable de nuestra tendencia a seguir nuestro propio camino y tratar de vivir nuestras vidas independientemente de Dios. Es un intruso maligno que no tiene derecho a residir en nuestra vida. Y, sin embargo, ha establecido su residencia allí y está constantemente en guerra allí con el Espíritu de Dios.

Pablo dice en Gálatas 5 que ”la carne codicia contra el Espíritu y el Espíritu contra la carne, y estos son contrarios entre sí para evitar que hagas lo que quieres”. Así que estos filisteos, como los vemos en este libro, describen la actividad de la carne en nuestra vida. Sansón era un joven nazareo, un santo consagrado, pero tentado por su carne, le dijo si a la tentación y ésta lo dominó.

Les escribo ahora a los jóvenes, si eres un creyente que conoce y ama a Dios, no te digo que desprecies a tus amigos no creyentes, pero si te digo que les enseñes del inmenso amor y perdón que Dios ofrece. Sin embargo, "que se conviertan ellos a ti y tú no te conviertas a ellos."

Les escribo ahora a los padres, no puedes elegir a quienes serán los compañeros e idóneas de tus hijas e hijos, pero si puedes prevenir enseñando claramente la Palabra de Dios y ayudándoles a obedecer el pedido claro: “No os unáis en yugo desigual”

A pesar que Sansón fue un chico al parecer engreído y terco, Dios lo usó de una manera poderosa; Dios utilizó a Sansón a pesar de su pecado, no debido a ello. Creo que el Señor hubiera utilizado a Sansón de una manera más grande si él hubiera permanecido como un vaso limpio, de acuerdo con el principio de 2 Timoteo 2:20-21.

“En una casa grande hay objetos de oro y plata, y también otros de madera y barro. Algunos tienen usos especiales, otros uso común. Así sucede en la casa del Señor. Si uno se mantiene puro, puede tener un uso especial, consagrado y útil para el Señor y listo para hacer toda clase de buenas obras.”

Martha Vílchez de Bardales