"Examínense para ver si siguen teniendo fe en el Señor. ¡Pónganse a prueba a ver si la pasan! ¿Se echa de ver que Cristo está en ustedes?” 2 Corintios 13:5
Después de doce meses llenos de desafíos, dificultades y turbulencias, se hace necesario examinar en que condición espiritual comenzamos el 2023.
Lo ideal seria que los desafíos, dificultades y turbulencias hayan producido “… un cada vez más excelente y eterno peso de gloria” 2 Corintios 4:17; es decir, que a estas alturas seas un cristiano más maduro, firme y lleno del Espíritu Santo, pero la realidad podría ser distinta.
Podría ser que en vez de madurar, has retrocedido en tu compromiso cristiano. ¿Por qué? Todas las razones se resumen en una: dejaste de mirar a Jesucristo y te enfocaste en mirar otras cosas.
¡Pon tu mirada en Jesús, Él es nuestro modelo perfecto!
Podría ser que en vez de estar firme, terminas con dudas e incertidumbre. ¿Por qué? Todas las razones se resumen en una: dejaste de alimentarte de la Palabra y llenaste tu mente de los valores del mundo.
¡Regresa a la Biblia, haz que ella sea tu guía diaria!
Podrías estar lleno del Espíritu Santo, pero terminas gobernado por deseos carnales. ¿Por qué? Porque descuidaste la relación más importante: todos los días debes adorar y obedecer a Dios.
¡En este último día del año, pídele a Dios que te llene con su Espíritu Santo!
¿Entendiste? Hoy debes hacer un examen de tu propia vida, reconocer los errores y ponerte a cuenta con Dios. La mejor manera de comenzar el 2023 será de la mano del Señor, así que no demores más: busca un lugar, medita, ora y pide la llenura del Espíritu Santo.
A todos los que me acompañaron en esta reflexión diaria: ¡Feliz y bendecido Año Nuevo!
¡Un abrazo fuerte!
Pastor Miguel Bardales