“El amor es sufrido, es benigno.” 1 Corintios 13:4
Este poderoso capítulo sacude los cimientos de todas las convicciones personales acerca del verdadero significado del amor. ¿Crees que un cristiano debe amar sólo a quienes conoce? ¿Te parece que un discípulo de Cristo puede excusarse diciendo que ama a la humanidad, pero no soporta a algunas personas? ¿Será correcto llamarse un creyente comprometido pero tiene rencores guardados en el corazón?
La esencia del cristianismo práctico es amar a las personas, todas las personas.
Por eso cuando alguien nace de nuevo, experimenta el inmenso perdón de Dios y con esa Gracia, recibe la capacidad y la habilidad de amar a las personas de una manera que no podía hacer antes de su conversión a Cristo. Conozco cristianas que una vez recibieron la semilla del amor y los años que han pasado no han secado esa semilla, sino que ha crecido, por eso donde van predican el evangelio, ayudan al necesitado, oran por los inconversos, sirven con amor a todos, dan el brazo y hasta sus vidas por ayudar, yo creo que el Amor transforma y bendice.
Sin embargo, Dios también ha provisto el poder de amar a través del Espíritu Santo. El amor es lo más grande del mundo. Es la fuerza más poderosa del universo y sólo el cristiano tiene la capacidad y el poder de producir este amor ágape sobrenatural.
San Agustín escribió: “No hay don de Dios más excelente que el amor. Sólo él distingue entre los hijos del reino eterno y los hijos de la eterna perdición”
El gozo es amor que se regocija en la verdad. La paz es el amor que no busca lo suyo. La paciencia es el amor que todo lo soporta. La bondad es el amor que se muestra en actos amables. La bondad es no tener en cuenta un mal sufrido. La fidelidad es el amor que cree en todas las cosas. La mansedumbre es el amor que todo lo soporta. Se vuelve bastante evidente que este amor es un amor sobrenatural que solo puede ser producido por el poder del Espíritu Santo en la vida de uno, y solo puede venir cuando uno se rinde y se somete al Espíritu Santo para recibir la llenura del Espíritu.
El amor se expresa siempre a través de acciones, por eso Pablo nos demuestra cómo puede verse en acción. El verdadero amor siempre se demuestra por medio de acción.
¿Por qué tiene que ser sufrido el amor? En esta frase se demuestra cómo es el Amor de Dios. El amor es sufrido porque el corazón de Dios se duele cuando espera con paciencia que sus hijos caminen en su voluntad y aguarda que todos se arrepientan. Como dice la Palabra en 2 Pedro 3:9: “El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.” Por lo tanto, si el amor de Dios está en nosotros, seremos pacientes con aquellos que nos molestan y nos lastiman, aguardaremos en oración que ellos se acerquen a Dios.
El amor es benigno. Cuando tenemos y mostramos el amor de Dios, se verá en actos simples de bondad. La persona que expresa benignidad tiene cualidades positivas como simpatía, comprensión, buena voluntad, paciencia y amor con las personas de su entorno. ¿Cómo muestras tu amor a las personas? Quizá te preguntes, debo ser benigno también con el que me hace sufrir? Dios re responde:
"Si no tengo amor, de nada me sirve hablar de parte de Dios y conocer sus planes secretos. De nada me sirve que mi confianza en Dios me haga mover montañas. Si no tengo amor, de nada me sirve darles a los pobres todo lo que tengo. De nada me sirve dedicarme en cuerpo y alma a ayudar a los demás. El que ama tiene paciencia en todo, y siempre es amable."
Mostremos a todos el inmenso Amor de Dios a través de gestos, palabras, es decir acciones que bendigan y alegren. Dios te quiere usar para ser un canal de Su Amor.
Con amor
Martha Vílchez de Bardales
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